La madre superiora quiere probar ante el pecado de la carne la lealtad de sus novicias, haciéndoles algunas preguntas:
– A ver, novicia Carminia ,¿que haría usted si un hombre le dice que por mas que se resista la va a violar?
A lo que la novicia responde:
– Le diría que mientras yo me levanto el hábito, se vaya bajando los pantalones.
La madre superiora espantada por la respuesta exclama:
– ¿Pero hija mía que dices?
Y Carminia responde:
– Pues claro madre superiora, yo con el hábito levantado puedo correr más rápido que él con los pantalones bajados!!