Página de Chistes

El cura sin paraguas recordando los mandamientos

Un cura llegó a su iglesia como todos los domingos para oficiar la misa, pero como llovía torrencialmente y no tenía paraguas, llegó empapado. En el momento del sermón y desde el púlpito dijo a los feligreses:

Queridos hermanos hoy vengo para hablaros de los 10 Mandamientos, los mismos que fueran entregados a Moisés bla bla…, pero antes debo deciros que alguien de entre vosotros ha tomado mi paraguas y he tenido que caminar bajo ese torrencial aguacero para cumplir con mi sagrado deber de oficiar la misa. Agradezco a quien lo tenga me lo devuelva y para no distraeros más con esta tontería, comencemos a revisar los Mandamientos:

Primer Mandamiento:

Amar a Dios sobre todas las cosas y a tu prójimo como a ti mismo -subiendo el tono-. Y yo soy el representante de Dios en esta Iglesia en este pueblo y todo lo que me hagáis a mí se lo hacéis a Dios también y me habéis robado el paraguas: sabed que se lo habéis robado a Dios también así que con toda seguridad os digo que seréis condenados por no cumplir con este Mandamiento.

Segundo Mandamiento:

No jurar su Santo Nombre en vano quiere decir que bajo juramento debéis decir siempre la verdad así que si sabéis quién tiene mi paraguas debéis decirlo o seréis condenados a las llamas del infierno.

Tercer Mandamiento:

Honrar al padre y a la madre. A la madre es posible que la honréis pero al padre sea cura o párroco de esta iglesia le habéis robado el paraguas, cabronazos, lo que demuestra el poco sentido de respeto y amor.

Por no cumplir este Mandamiento también seréis condenados.

Cuarto Mandamiento:

Celebrar las fiestas. Y hoy es domingo así que debemos cumplir con nuestra presencia aquí y yo debo estar aquí para celebrarla. Para estar aquí he debido caminar bajo esta lluvia sin paraguas hecho un cabrón por que me habéis robado el puñetero paraguas.

Quinto Mandamiento:

No matar. Pero a mi me habéis matado cuando me quitasteis el paraguas. No ha sido de un tiro, no ha sido una puñalada, pero me habéis matado robándome el paraguas. Seguramente pescare una pulmonía y hasta pudiera llegar a morir. Y como habéis matado podéis ser condenados al infierno por cabrones.

Sexto Mandamiento:

No fornicar. Se refiere a a a… ¡¡¡Joder, acabo de acordarme donde dejé el paraguas!!!

 

 

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